Sus poros se abrirán y sentirá el aroma a Channel y a crepes, un poco de todo, volviendo a sentir el tópico parisino del que se enamoró veinte años atrás. Habrá caminado entonces durante un par de horas, junto al Sena, inconsciente. Entonces, cuando vuelva en sí, se quedará quieto un segundo y se girará lentamente, alzando la vista. Allí estará ella, la dueña de su impulso, luciendo su mejor vestido dorado y platino, que se funde con el azul oscuro casi negro del cielo. Sus bombillas se reflejarán en los ojos del amateur, difuminando acuosamente dicho reflejo que se desliza por sus mejillas. Su conciencia se hará la promesa, en ese mismo momento, de que jamás volverá a abandonar París. Ni física ni psíquicamente.
Daría mi vida por volver a verte.
Que precioso joven amiga, amor en la ciudad del amor, de gran sensibilidad y belleza.
ResponderEliminarUn abrazo.
P.D. Te supongo enterada que Zaragoza va a quedar unida con París 3 días por semana en vuelos con Rainair... ya ves, tu Paris querido aquí al lado.
Siempre nos quedará París
ResponderEliminarSiempre nos quedará el amor
Y siempre nos quedarán las preciosas letras escritas por una hermosa niña-mujer como tú.
Besitos, preciosa
(Cambiando de tema: qué tal va la 2ª evaluación)
hay veces que la memoria (te/me) mata.
ResponderEliminarme ha parecido un texto humano, esos de color turquesa que saben apreciar la belleza que da cada palabra.
enhorabuena.
muchas gracias Sara, me alegro que te gusten
ResponderEliminarte quiero(L)
Si quieres verlo, deberas buscar la forma de hacerlo, es la unica forma de calmar la sed que la necesidas nos produce.
ResponderEliminarte sigo, te leo
un besote
lovely photo~
ResponderEliminarMe parece precioso como siempre... al igual que la foto, eres genial! tienes un don Sara... eso esta claro! aunque no te comente tanto,no es porque no quiera, sno xk ando sin mucho tiempo ultimamente, pero aun así sigo pasandome, eso tenlo claro! n besazoo Francesilla!
ResponderEliminar